Dentro de unas horas sabremos si el sueño olímpico de Madrid, compartido por una gran mayoría de españoles de otras regiones, se hace realidad. 98 miembros del Comité Olímpico Internacional emitirán en Buenos Aires (Argentina) sus votos para designar la sede de los juegos de 2020. Compiten con Madrid, Tokyo y Estambul, dos candidaturas que, como la nuestra, han sido muy bien trabajadas y presentan perfiles diferentes. La ciudad japonesa es muy confiable y ofrece mucha seguridad. La aspirante turca tiene en contra la duda de la estabilidad política y social y a favor la apertura de la cita olímpica a un país musulmán, aunque la inversión a realizar supera los 15 mil millones de euros, más de diez veces la que tendría que realizar la capital española.
No hay favorita, pero los expertos consideran que se producirá una reñida votación entre Madrid y Tokyo y que pequeños detalles pueden decantar la balanza de un lado o de otro, por lo que los integrantes de la delegación española están multiplicando sus esfuerzos para dar a conocer hasta el mínimo detalle del proyecto.
Madrid presenta una candidatura muy avanzada en infraestructuras ya que el 85% de las instalaciones están construidas y sólo se requerirá una inversión de 1.500 millones de euros. Cuenta, además, con un respaldo popular que llega al 90% y, en estos momentos, el número de voluntarios se acerca a los cien mil. Podría parecer que la inversión prevista es grande, que lo es, pero no tanto si se relaciona con los estudios económicos realizados según los cuales se obtendrían unos ingresos de 3.900 millones de euros y otros beneficios adicionales como la llegada de 800 mil extranjeros que dejarían una cifra cercana a los 600 millones de euros y la creación de 75 mil puestos de trabajo directos y otros 300 mil indirectos.
La confianza que actualmente trasmite España sobre su recuperación económica, su capacidad hotelera, la calidad de su restauración y sus medios de transporte de primer nivel, entre los que destaca la alta velocidad que unirá Madrid con las subsedes, son otros factores que pueden y deber ser determinantes.
La candidatura olímpica de Madrid cuenta con 8 subsedes. En Valencia se van a celebrar los deportes náuticos. En Barcelona (Luis Companys, antiguo Estadio Olímpico de Montjuic), Valladolid (José Zorrilla), Córdoba (El Arcángel), Zaragoza (La Romareda) y Málaga (La Rosaleda), serán escenarios de encuentros de fútbol. Getafe y Paracuellos del Jarama albergarán, también, algunas pruebas. Estos lugares, sin duda, se verán beneficiados por la celebración de los juegos.
Todos estos argumentos son valiosos, pero no lo es menos el trabajo realizado por el Comité organizador encabezado por Alejandro Blanco, miembro del COI y hombre de confianza de su actual presidente, Jacques Rogue, que dejará su cargo poco después de ser elegida la sede del 2020. El trabajo técnico realizado para la elaboración de una propuesta distinta a los proyectos virtuales presentados en anteriores convocatorias es de gran laboriosidad y realismo y de ser elegida Madrid podría ser el principio de un nuevo concepto en la concesión de los juegos olímpicos. La diplomacia desplegada desde que se tomó la decisión de presentar por tercera vez consecutiva la candidatura de Madrid es de gran relevancia y especialmente en este tramo final que cuenta con representación de las máximas instituciones españolas, lo que supone un respaldo de gran envergadura. En Buenos Aires se encuentran la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, los príncipes de España, Letizia y Felipe, y el presidente del gobierno, Mariano Rajoy. Asimismo numerosos deportistas como Pau Gasol o Teresa Perales y periodistas de todos los medios han llegado a la capital argentina para apoyar el sueño olímpico de Madrid. Otros que están lejos de Buenos Aires -el tenista Rafael Nadal o el futbolista Cristiano Ronaldo, por ejemplo- estarán presentes a través de un video.
Después de la última presentación de las tres candidaturas en el Hotel Hilton, los nervios estarán a flor de piel. Madrid será la última en intervenir a las cinco de la tarde, previamente lo habrán hecho Estambul y Tokyo. A las diez de la noche está previsto se de a conocer el nombre de la ciudad que organizará los Juegos Olímpicos de 2020. A esa hora ya la fiesta programada en la simbólica Puerta de Alcalá llevará varias horas. Y allí estaremos y espero que sea para celebrar que Madrid es olímpica, por fin, después de 4 intentos.